16 junio 2006

Artículo 10: Lô ohetibô (I)

El artículo 10 desvela bien a las claras el talante con el que se ha elaborado el Estatuto. Muchos de los objetivos formulados son desde luego nobles y expresan aspiraciones no sólo legítimas sino imprescindibles para cualquier sociedad que trate de promover el crecimiento y las condiciones para el desarrollo personal de los ciudadanos, pero se hace todo a través de un lenguaje tan fofo, tan inane, tan torpe, tan propagandístico, tan pendiente de lo políticamente correcto, tan ajeno a lo que debería ser una norma jurídica con pretensiones de regular la convivencia de unos ciudadanos libres y responsables que no puede evitar caer permanentemenete en el terreno de lo obvio, de lo partidista y de lo ridículo.

Empecemos:

1. La Comunidad Autónoma de Andalucía promoverá las condiciones para que la libertad y la igualdad del individuo y de los grupos en que se integra sean reales y efectivas; removerá los obstáculos que impidan o dificulten su plenitud y fomentará la calidad de la democracia facilitando la participación de todos los andaluces en la vida política, económica, cultural y social. A tales efectos, adoptará todas las medidas de acción positiva que resulten necesarias.
Muy bien. Ahora veamos cómo piensan hacerlo, porque lo que sigue es casi un plan de gobierno.
2. La Comunidad Autónoma propiciará la efectiva igualdad del hombre y de la mujer andaluces, promoviendo la democracia paritaria y la plena incorporación de aquélla en la vida social, superando cualquier discriminación laboral, cultural, económica, política o social
Así me gusta. Empezamos duros. Primero se afirma la promoción de la libertad y la igualdad del individuo y a renglón seguido se definen las normas básicas de la discriminación por razón de sexo. Positiva, le llaman. Para las mujeres es desde luego humillante, eso de no estar nunca segura de si consigues un puesto por tu mérito o por lo que tienes entre las piernas me parece una tortura consistentemente sofisticada. Remuévanse los obstáculos que puedan provocar las discriminaciones individuales. Legíslese para que los órganos administrativos o judiciales convenientes puedan detectar, sancionar y corregir los abusos, pero, hombre por Dios, no se institucionalice la discriminación por muy guay y muy políticamente correcta que sea, y menos dentro de una norma jurídica básica. Lo de promover la democracia paritaria es sencillamente indignante. Que por ley se impongan listas (electorales o de lo que sea) paritarias o se desarrollen planes tan absolutamente delirantes como esas ayudas de la junta a aquellas personas que se formen en profesiones no habituales entre los de su sexo atenta directamente contra las bases de una sociedad meritocrática, como se supone que tendría que ser la nuestra. Acaso lo que quiera promoverse sea, como justo reflejo de la clase política, una sociedad mediocrática (el maestro Paco Robles dixit).
3. Para todo ello la Comunidad Autónoma, en defensa del interés general, ejercerá sus poderes con los siguientes objetivos básicos:
Pueden temblar antes de continuar.
1º La consecución del pleno empleo estable y de calidad en todos los sectores de la producción, con singular incidencia en la salvaguarda de la seguridad y salud laboral, la conciliación de la vida familiar y laboral y la especial garantía de puestos de trabajo para las mujeres y las jóvenes generaciones de andaluces.
Pero cómo que especial garantía. Por qué este paternalismo absurdo con las mujeres. Si están bien espabiladas y no necesitan tutela de nadie. Yo convivo con ellas a diario y sé de lo que hablo. Una vez más: necesitamos sólo un principio general de actuación. Si hay sectores de la población (en el campo, en barrios marginales o donde sea) que precisan de atención o promoción especiales, que se haga mediante la acción ejecutiva de los gobiernos locales y regionales; pero cómo es posible que se defina desde la norma básica un principio de actuación coyuntural, conscientemente discriminatorio por razones de sexo. Muy simple, porque no lo quieren coyuntural. No. Parece ser que las mujeres necesitan muletas para moverse por el mundo, y alguien quiere que las necesiten siempre. Y los jóvenes. Pues lo mismo.
2º El acceso de todos los andaluces a una educación permanente y de calidad que les permita su realización personal y social.
Vale. Claro que eso de la realización social parece que tiene que ver con esto:
3º El afianzamiento de la conciencia de identidad y de la cultura andaluza a través del conocimiento, investigación y difusión del patrimonio histórico, antropológico y lingüístico.
Sencillamente, repugnante. Cada vez que oigo hablar de identidades colectivas, cojo el casco y me pongo a dar paladas a ver si termino el búnker de una puñetera vez. Quieren a los andaluces afianzados en una conciencia de identidad andalucista. ¿Recuerdan la unidad de destino en lo universal? Pues esto es lo mismo, pero con Farruquito, el Rocío y el aceite de oliva virgen extra dentro de una caseta de feria. Porque es falso que "a través del conocimiento, investigación y difusión del patrimonio histórico, antropológico y lingüístico" (están bien escogidas las disciplinas, ¿eh?, no me dirán que no) pueda desarrollarse nada parecido a una conciencia de identidad colectiva, salvo que ese conocimiento y esa difusión estén previamente seleccionados: conocer y difundir aquello que el andalucismo piensa que es propio de los andaluces. Por ejemplo, unos arqueólogos acaban de descubrir sin apenas dudas razonables que el Tesoro del Carambolo no es tartésico, sino fenicio, es decir, no local, sino oriental. ¿Se han enterado ustedes? ¿Escucharon la noticia en Canal Sur? (Canalsu, ¿sabes tú algo de eso?)
3º bis. La defensa, promoción, estudio y prestigio de la modalidad lingüística andaluza en todas sus variedades.
De premio. Verdaderamente impresionante. Primero la llaman "modalidad lingüística andaluza" y luego, ante la previsible pregunta: "¿Cuál de ellas?", añaden que "en todas su variedades". O sea, que no hay modalidad lingüística andaluza. No es ya que el habla de Almería no se parezca absolutamente en nada a la de Huelva ni la de Granada a la de Sevilla ni la de Cádiz a la de Jaén, es que en la misma provincia las "modalidades lingüísticas" son tan variadas como que, por ejemplo, nadie medianamente sensato sería capaz de afirmar que uno de Coria del Río participa de la misma "modalidad lingüistica" que alguien de Alanís. Y eso es lo que pretenden promocionar, estudiar y prestigiar. Pretenden reglamentar también no ya la lengua (si Dios existe, por la presente quiero que quede constancia de que le estaré eternamente agradecido por no habernos concedido una "lengua propia"), sino hasta el habla de la gente. Yo hace mucho tiempo que vengo descojonándome periódicamente con esto (que por supuesto es un proyecto que, gracias al Estatuto, a partir de ahora será defendido y promocionado desde las instituciones, pues su utilidad pública salta a la vista), pero no, andaba yo equivocado, voy a tener que tomármelo en serio, muy en serio, es posible que en unos años los cuestionarios de las oposiciones se redacten conforme a estas normâ ortográfiqâ. Así que ahora mismo lo coloco en Favoritos. Y de paso me tomo un respiro. Uf.

1 comentario:

mayo dijo...

No subestimemos el poder del lado oscuro, estoooo de unos políticos con mucho poder y presupuesto, y muchas ganas de usarlo en ingenierías sociales varias.

¿Acaso no eran más variadas las variedades del euskera, tanto que entre los habitantes de según qué valles había verdaderas dificultades para entenderse?. Y, sí, creo que todos conocemos casos de pueblos andaluces en los que el acento, el vocabulario e incluso la gramática son bastante peculiares, pero eso no tiene ni pizca de comparación con la labor realizada en euskadi con dinero público y reglamentos. Así que previsiblemente, y como empieza a ser costumbre por estos pagos, se alabará de boquilla la enriquecedora variedad de las modalidades lingüísticas andaluzas mientras que con los hechos se intentará imponer una modalidad lingüística andaluza batúa: la jabla andalusa unía o unificá. Y me da en la nariz que se parecerá bastante a la sevillana.